El cine se ha convertido en la actualidad en la forma más extendida de arte, por encima de la pintura, la lectura, el teatro y la ópera. Cada año, miles de millones de espectadores asisten a las salas de cine, sin importar la clase social a la que pertenezca, la edad o la nacionalidad. Sin embargo, pocos son los que conocen el esfuerzo y los grandes retos que deben enfrentar los profesionales del “séptimo arte” para proyectar en la pantalla grande escenas y guiones fascinantes. De ahí que les mostramos a continuación algunos aspectos que vale la pena destacar entre el cine independiente y el cine industrial.