Escrito por: Elvira Lora

Adrés Avelino Abreu.

El “¡buen día!” retumba y llena de energía el segundo piso de la sede principal de Avelino Abreu, compañía por acciones. Quienes están en la recepción y también los que se encuentran en las oficinas administrativas se confunden en abrazos con “don Andrés”, creador de este emporio que comercializa más de 20 productos y servicios automovilísticos.

Siempre de corbata roja, con libreta en mano y dispuesto a no hacer esperar a quienes lo buscan, cuando entra a su oficina revisa cada uno de los diminutos prototipos de carros urbanos, de carga y de la construcción. Réplicas exactas de los modelos que vende y repara en tres sucursales en Santo Domingo y una en Santiago de los Caballeros.

“Uno se imaginaría que cuando comencé a exportar vehículos tenía Internet o teléfonos directos, o que incluso todavía ahora me comunico a través de un sistema de redes con los ingenieros alemanes o japoneses… Yo me río”. El contacto personal es de tanta importancia para Andrés Avelino Abreu que le atribuye a su talento innato de establecer lazos de cercanía su éxito con los fabricantes de la industria automovilística que representa en la República Dominicana.  

Este afán de “estar cerca”, provocaría que de Jarabacoa, donde nació, se mudara a Santo Domingo, y desde la capital dominicana emprendiera viajes hacia Alemania, Japón, Estados Unidos, China… En fin, viajes a todas las sedes de fabricación y ensamblaje de autos. “Uno tiene que hablar, hablando la gente se entiende”, asegura.

Confiesa que si en la década de 1970 no se hubiese atrevido a entablar un diálogo con la Volkswagen, la firma alemana no hubiese conocido la necesidad que tenía esta marca de presentarse al mercado dominicano. La penetración de esta marca, tras la dictadura trujillista, fue tal, que quienes fueron niños y niñas durante la década de los 80 recuerdan con añoranza el “juego del cepillo”.

El último trimestre de este año la Volkgawen se encuentra en una encrucijada, pero para el empresario no se ha tenido un accidente fatal y la muestra de la tecnología y seguridad con que está fabricado el vehículo es que en el mercado dominicano hay montones de carros usados pero no Volkswagen porque no aparecen. “Quien invierte en esta marca lo hace en un producto de primera calidad y le va a durar todos los años del mundo”. 

Los tres consejos de Avelino Abreu
Surgen de su experiencia de vida, de impulsar un sector del cual hoy se siente orgulloso de ser pionero. Consejos que compartió con la audiencia aglutinada en la III Feria Emprendedores. 

La especialización
Cuando decidió poner un negocio entendió que debía tratar por todos los medios de especializarse en un único producto, y focalizar en él toda su atención, analizando todas las necesidades del mercado en ese momento. “Existía la necesidad de aumentar el mercado vehicular e impulsar la industria de la construcción”.

Maximizar ingresos
Aunque prefiere no declarar su inversión inicial –se limita a decir que fue mucho dinero para la época- lo cierto es que afirma que las primeras provenían de sus ahorros, los cuales atesoraba desde los 12 años cuando comenzó a trabajar junto a su padre.

Escuchar buenas ideas
Admite que no hay fórmulas mágicas, pero le ha dado mucho resultado escuchar a todas las personas que laboran junto a él. Por esto es un impulsor del trabajo en equipo y por proyectos, y la colaboración entre distintos departamentos.

El reconocimiento de la Feria Emprendedores

Junto a las fotografías de sus cinco nietos y sus hijos hay innumerables reconocimientos a su trayectoria, entre estos, el entregado durante la tercera edición de la Feria Emprendedores. Para él, lo mejor de este acto fue que pudo encontrarse con Pepín Corripio, a quien describe como un amigo de toda la vida.

“Venimos desde hace años trabajando y cultivando la amistad, entre nosotros y nuestras familias”, asegura Abreu. Le inquietó que se le llamara emprendedor. “Modesta y aparte no sé si lo soy. Solo me at reví a comenzar con operaciones de negocios a las cuáles la gente le temía, y en verdad no es tan fácil, crear con – fianza, crear una marca, hacer caminos”.

Justo en ese momento coloca el reconocimiento junto a otros que ate sora, asiente con la cabeza e indica que debe aten der más y nuevas oportunidades de negocios. Es cuan do vuelve y dice: “¡Buen día!”.